viernes, 15 de julio de 2011

Beebop, nueva incursión de Peace Drums

Las baterías Peace son instrumentos taiwaneces, y tiene una gama bastante variada. No solo se dedican a la batería, sino también a herrajes, platillos y percusión.


En esta ocasión tenemos el modelo Beebop de gama alta, es una batería de 4 piezas y unas dimensiones bastante reducidas, lo que hace que el sonido sea más limpio. Esta compuesto por un bombo de 18x18, un redoblante o caja de 14x5,5; un tom pequeño de 12x9 y un granadero de 14x14, además trae un pedal simple, un paral tipo boom para platillos y un paral simple para Hihats.



La batería tiene un diseño escarchado y de colores degradados, los cuales la hacen muy llamativa, además de su pequeño tamaño y esta compuesta por madera de Maple (4 pliegues).



Este modelo lleva su nombre debido a que es una batería diseñada para tocar jazz, por su sonido limpio y “latoso”, los cuales dejan un retumbre por cada golpe, generando así, ritmos impecables, con una variante de vibraciones por cada tambor.
Al llegar a los años 40, el jazz se encontraba musicalmente en un callejón sin salida. Muchos músicos estaban frustrados por las limitaciones que suponía tocar en grupos grandes (Big Band), y empezaron a buscar formas de expresión nuevas y originales.

Por esta época ya ha saltado a la escena la influencia cubana, presidida por el trompetista Mario Bauzá, que había estado en los años 30 en la big band de Chick Weeb, y el bongosero chano poso, enrolado en la banda de un trompetista llamado Gizzy Gillespie que, por aquellas fechas, aún no era un revolucionario.


El Bop comienza a gestarse como consecuencia de la llegada a las orquestas de un gran número de músicos muy jóvenes, para sustituir a los que fueron movilizados durante la guerra. Muy pronto, las Big bands deben desintegrarse pues los circuitos comerciales se han hundido tras la guerra y resulta difícil mantener formaciones de tan gran tamaño. Como señalan Case y Britt, los músicos se dispersan en una infinidad de pequeños grupos que, obviamente, no pueden continuar con una música que exige grandes formaciones y, en consecuencia, están dispuestos a asumir cualquier propuesta, por muy radical que pareciese en ese momento.

La generación más joven del jazz, sobre todo Parker y Gillespie, optaron por reírse abiertamente de las normas. La respuesta de Gillespie al aburrimiento de la rutina del swing fue tocar a un ritmo furioso y llenar el breve solo que se le concedía en la orquesta con tantas ideas armónicas y melódicas como podía.

Aunque los bateristas modernos buscan distintos tipos de sonidos para hacer fusiones, no necesariamente se toca jazz con este instrumento, se puede tocar varios géneros musicales, desde Rock hasta Joropo, todo depende de lo que el músico busque en su instrumento, también varia de la madera y de las dimensiones de la misma, sólo se necesita saber qué quieres tocar, y cómo lo quieres tocar, para buscar el instrumento que se adapte a tus necesidades, también hay que tener en cuenta el tipo de parches que se van a utilizar y los platillos, pero esto es algo que se planteará en una próxima entrega.

No hay comentarios:

Publicar un comentario